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Cinco estrategias que nos pueden ayudar a motivar a tu hijo en el estudio.

El éxito académico no solo depende del talento innato; también se trata de cultivar hábitos y rutinas efectivas de estudio. Establecer unos hábitos de estudio sólidos para tu hijo no solo mejora su rendimiento académico, sino que también le enseña habilidades valiosas de organización y disciplina que perdurarán toda la vida. Aquí te presentamos cinco […]

El éxito académico no solo depende del talento innato; también se trata de cultivar hábitos y rutinas efectivas de estudio. Establecer unos hábitos de estudio sólidos para tu hijo no solo mejora su rendimiento académico, sino que también le enseña habilidades valiosas de organización y disciplina que perdurarán toda la vida. Aquí te presentamos cinco rutinas de estudio para ayudar a tu hijo a aprender mejor:

1. Establecer un espacio de estudio atractivo

Una de las cosas más importantes que hay que hacer es crear un entorno de estudio que sea cómodo, organizado y libre de distracciones. Así, tener un escritorio bien iluminado y decorado con sus intereses puede hacer que le apetezca estudiar un poquito más.

2. Celebrar los logros, grandes o pequeños

Alineados con esa cultura del esfuerzo que pretendemos desde Colegio Greenfield, os animamos a celebrar cada pequeño logro, desde completar una tarea simple hasta resolver un problema complejo. Esto puede ser mediante elogios verbales, una calcomanía divertida, o permitiéndole elegir una actividad especial para disfrutar después del estudio; al final son estas pequeñas cosas las que reconocen que su esfuerzo está dando frutos.

3. Conectar el estudio con intereses personales

El hecho de Incorporar temas o ejemplos de sus intereses personales en el estudio ayuda a conectar los contenidos con sus pasiones y que sean más fáciles de recordar. Por ejemplo, si le gusta el fútbol, usa ejemplos de estadísticas de jugadores para enseñar matemáticas o, si tiene interés en los animales, incorpora ejemplos de ciencias naturales.

4. Establecer objetivos alcanzables

Tenemos que establecer metas claras y alcanzables para cada sesión de estudio. Por supuesto, estos objetivos deben ser desafiantes a la par que realistas para que así, al lograrlos, les metamos en una espiral que les motive a seguir aprendiendo.

5. Ser un modelo positivo

Los niños suelen seguir el ejemplo de los adultos, así que tenemos que dar ejemplo en todo lo que rodea al aprendizaje y la curiosidad. El hecho de hablar sobre nosotros, sobre nuestro día, sobre nuestras propias experiencias escolares, puede despertar ese interés en seguir aprendiendo.

La motivación por el estudio por supuesto conlleva tiempo y paciencia, no obstante, desde Colegio Greenfield creemos que estos pasitos pueden ayudar a conseguir dicho objetivo (desafiante a la par que realista).

¿Quieres saber más? Ven a visitar nuestro colegio situado en la zona sur de Madrid. Más información en www.colegiogreenfield.es o escríbenos a hola@colegiogreenfield.es

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